La conjura del silencio ya no existe pues la presencia de los hermanos del Cosmos es ahora imposible de ocultar. Ellos se manifiestan abiertamente de día o de noche y dando la evidencia necesaria para que sea el pueblo humano el que decida si es verdadero. Es esta presencia la que ha forzado al Poder a admitir qué tal vez, como ellos dicen, estas naves no sean de nuestro mundo. Más yo les aseguro que no son de nuestro mundo, y también le aseguro que no están aquí simplemente para ser vistos si no para dar evidencia al mundo que no estamos solos en el universo, que vienen en paz, y que en un día no muy lejano harán contacto con el mundo.
Las demostraciones son muy claras y desafían nuestra lógica y entendimiento del universo, pero aún falta más. Llegará el día en que muchos sean testigos de cómo estas naves descienden del cielo y verán a sus tripulantes salir de ellas. Tal y como me lo han mostrado en mis visiones. Un evento único para nuestra sociedad mas no para el mundo, pues civilizaciones más antiguas que la nuestra han tenido contacto con ellos. Desafortunadamente, no hicimos lo necesario como mundo para mantener el puente entre nosotros y el Cosmos. Aunque parte de algunos pueblos lograron mantener este puente y partieron con ellos.
El tiempo del contacto con nuestros hermanos del Cosmos está muy cerca, y seremos nosotros lo que decidamos si recibimos su ayuda o la rechazamos. Desafortunadamente, debido a nuestro mal comportar, grandes dolores también se avecinan. Dolores tan grandes que las palabras no podrán narrar. Serán tiempos oscuros y de mucho dolor.
Dante J
Fraternidad Cósmica
Agosto 7, 2021